Me llaman Calma y antes era nerviosa. Me encontraron perdida en los bosques del Pirineo, la zona de Biescas. Desde esa epoca oscura de mi infancia perruna tengo miedo a la gente. La chica que me encontró me dejó en la protectora de Jaca. Vino Bea y me adoptó. Ahora soy la Reina de los Pirineos, pero también de la Sierra.